Con la cercanía del calendario electoral, crece el debate sobre los límites del proselitismo y la campaña anticipada en Guatemala.

En las últimas semanas, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha recibido múltiples denuncias por actividades políticas fuera del plazo permitido, en un contexto en el que la convocatoria a elecciones y el cierre del empadronamiento se aproximan, con efectos directos sobre la representatividad del proceso.

Además, el TSE enfrenta una presión creciente para fiscalizar de forma efectiva, en medio de un entorno digital que dificulta el control y la supervisión de los actos proselitistas.

Para profundizar en los retos institucionales, normativos y ciudadanos de cara a un nuevo proceso electoral, entrevistamos a Alexander Velásquez, secretario general del TSE, y a Pablo Portocarrero, jefe de la unidad especializada en medios. Ambos reconocen los desafíos de fiscalizar en una era digital, donde los límites de la propaganda política se diluyen con facilidad.

Los partidos no es que quedan cancelados en automático, pues la ley prevé el derecho de defensa, así lo señaló el Secretario General de TSE

La integridad del proceso electoral comienza mucho antes del día de la votación. Desde el control sobre los tiempos de campaña, el monitoreo de la comunicación política, hasta el empadronamiento ciudadano, cada etapa representa un eslabón clave en la cadena de confianza institucional.

Lo invitamos a escanear el código QR que se encuentra en pantalla y ver esta entrevista completa realizada en Canal Antigua.

Redacción: Roxana de León