Guardia Nacional llega a Los Ángeles por las protestas contra redadas; civiles hacen barrera humana para impedirles el paso

Guardia Nacional llega a Los Ángeles por las protestas contra redadas; civiles hacen barrera humana para impedirles el paso

Van dos días de protestas en Los Ángeles por las redadas de ICE, algunas con uso de fuerza, mientras los civiles exigen el cese de las medidas, los uniformados intentan dispersarlos con gases.

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08/06/2025 17:37
Fuente: Prensa Libre 

Este domingo 8 de junio, la ciudad de Los Ángeles, en Estados Unidos, volvió a ser escenario de enfrentamientos entre las autoridades y manifestantes, mientras tropas de la Guardia Nacional empezaron a desplegarse tras dos días de protestas por las redadas con uso excesivo de la fuerza contra inmigrantes en situación irregular.

El presidente Donald Trump prometió que las tropas asegurarán “una muy severa legalidad y orden”, mientras dejó la puerta abierta a más despliegues militares en otras ciudades.

“Tienen gente violenta y no vamos a dejar que se salgan con la suya”, dijo el mandatario a reporteros.

Imágenes difundidas este domingo en redes sociales y por noticieros locales muestran cómo la población latina, con carteles y banderas de distintos países en las manos, forma barreras humanas para contener el paso de los uniformados. En algunos puntos no ha pasado a más, mientras que en otros los manifestantes han sido dispersados con gases.

El detonante

El viernes 6 de junio, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, en inglés) realizó una serie de redadas migratorias en Los Ángeles con agentes armados.

Al menos tres grandes operativos migratorios ocurrieron ese día, dos en negocios del Distrito de la Moda, donde se efectuaron los arrestos de por lo menos dos docenas de trabajadores, según reportaron activistas que presionaban a los agentes para evitar el operativo.

La guatemalteca y congresista demócrata por California, Norma Torres, condenó estos operativos contra los migrantes.

“No pueden entrar a la comunidad y aterrorizar a los ciudadanos como lo hicieron. No pueden seguir entrando y hacer un perfilado racial a la gente sin saber si están deteniendo a ciudadanos estadounidenses. No tenemos ni idea de a quién han secuestrado. Es hora de rendir cuentas”, dijo Torres.

Mientras tanto, Robert Luna, alguacil del Condado de Los Ángeles, indicó que apoyarán a cualquier agencia policial que solicite ayuda, siempre que esté sufriendo un ataque violento o una situación similar. Sin embargo, no darán apoyo para detener a alguien en el marco de “la aplicación de una ley de migración estrictamente civil”.

En los últimos días, agentes federales han disparado granadas aturdidoras y gases lacrimógenos contra manifestantes que se oponen a las detenciones de migrantes en una ciudad con fuerte población latina.

Apoyo militar

Las tropas de la Guardia Nacional, una fuerza militar de reserva utilizada en situaciones como desastres naturales, pero rara vez en disturbios civiles, comenzaron a llegar a Los Ángeles la madrugada de este domingo, con unos 300 soldados desplegados.

Se encargan de “llevar a cabo la protección y seguridad de instalaciones y personal federal”, según el comando militar.

Con cascos, uniformes camuflados y armamento, las tropas están destacadas en una instalación federal del centro de Los Ángeles, donde se unieron a autoridades del Departamento de Seguridad Interior.

La medida fue considerada el sábado como “deliberadamente provocadora” por el gobernador de California, Gavin Newsom.

Los gobernadores demócratas criticaron el despliegue militar ordenado por el mandatario republicano.

“La movida del presidente Trump (…) es un alarmante abuso de poder”, dijeron en un comunicado conjunto. “Es importante que respetemos la autoridad ejecutiva de los gobernadores de nuestro país para manejar su Guardia Nacional”.

En total descuerdo

Esta es la primera vez en 60 años que un presidente estadounidense despliega la Guardia Nacional de cualquier estado sin contar con la autorización del gobernador a cargo, que es el comandante en jefe de las fuerzas militares estatales.

La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) condenó desde el sábado el despliegue de las tropas y dijo que estudia imponer una demanda.

La administración republicana tomó la decisión a pesar de que funcionarios electos, la Policía y el alguacil de Los Ángeles confirmaron que las protestas, que en su mayoría se mantuvieron pacíficas, estaban contenidas.

La mayor queja de Trump es el “supuesto” daño del edificio federal que alberga la cárcel migratoria de Los Ángeles, que este domingo luce con grafitis contra el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).