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¿Por qué no se puede jugar futbol en Semana Santa? Este y otros 7 mitos relacionados con la Semana Mayor
No bañarse en Viernes Santo, no escuchar música o no barrer son algunos de los mitos y supersticiones que persisten durante estas fechas, aunque no tengan respaldo doctrinal.
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El Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa para la religión católica. A partir de esta fecha, se comienza a rememorar el camino de Jesús hacia la cruz.
La Semana Santa es una de las épocas más significativas para la fe católica, cuando las procesiones, alfombras de aserrín y ceremonias religiosas transforman las calles en un escenario de devoción.
Sin embargo, junto a estas tradiciones arraigadas, persisten mitos y supersticiones que, aunque carecen de fundamento doctrinal, han perdurado en la cultura popular.
Uno de los más curiosos es la creencia de que no se debe jugar futbol durante la Semana Santa, especialmente el Viernes Santo. ¿De dónde proviene esta idea?
¿Por qué no se juega fútbol en Semana Santa?
Según la tradición oral, patear un balón durante estos días —especialmente el Viernes Santo— es como “patear la cabeza de Cristo”. Esta analogía busca enfatizar el respeto hacia el sufrimiento de Jesús en su camino al Calvario.
Aunque la Iglesia católica no prohíbe explícitamente esta actividad ni ninguna otra práctica deportiva durante la Semana Mayor, muchas familias y comunidades evitan los juegos ruidosos o competitivos como muestra de recogimiento.
En algunas zonas con fuerte influencia religiosa, es común ver canchas vacías durante el Triduo Pascual (Jueves, Viernes y Sábado Santo). Sin embargo, entre las nuevas generaciones, esta costumbre ha perdido fuerza y el fútbol sigue siendo parte del entretenimiento en días de descanso.

Otros mitos y supersticiones de Semana Santa
Además de la creencia de que hay restricción sobre el futbol, existen otros pensamientos populares que, aunque no tienen base bíblica, forman parte de las tradiciones que rodean la Semana Mayor:
1. No bañarse el Viernes Santo
En algunas regiones, se cree que bañarse en ríos durante Semana Santa puede transformar a la persona en pez. Esta superstición, sin fundamento científico ni religioso, probablemente surgió para prevenir accidentes en aguas peligrosas.
Incluso existe una leyenda de Semana Santa que habla sobre las sirenas de Viernes Santo, en la que se relata que Dios convirtió en sirena de piedra a una hermosa mujer de un pequeño pueblo de Retalhuleu por haber violado la prohibición de bañarse ese día, debido a la muerte de Nuestro Señor Jesucristo.

2. El color rojo atrae al diablo
Vestir de rojo en estos días se asocia con el pecado y la tentación, vinculando el color con el demonio. Aunque no existe enseñanza católica que lo respalde, muchas personas prefieren evitar tonos llamativos por precaución.
3. No escuchar música
Algunos creyentes evitan escuchar música que no sea religiosa, especialmente géneros como el rock o el reguetón, para mantener un ambiente de reflexión. Sin embargo, la Iglesia no prohíbe la música, aunque recomienda priorizar la oración.
4. No barrer ni clavar en Viernes Santo
Se dice que barrer ese día es como “barrer el rostro de Cristo”, y clavar algo evoca los clavos de la crucifixión. Estas interpretaciones simbólicas no tienen base teológica, pero reflejan el deseo de respetar el dolor de Jesús.

5. No salir después de las 15 horas (la hora de la muerte de Cristo)
Una antigua creencia advierte que salir a esa hora puede atraer la ira divina, provocando lluvias o desgracias. En realidad, se trata de una superstición sin fundamento religioso.
6. No cortarse el cabello o las uñas
Algunos piensan que hacerlo “corta el cuerpo de Cristo”, mientras que otros creen que cortarse el pelo en Viernes Santo asegura salud capilar todo el año. Ninguna de estas ideas tiene sustento en la fe católica.
7. No trabajar en Jueves y Viernes Santo
Aunque estos días en Guatemala son asuetos oficiales, la idea de no trabajar proviene de la tradición de dedicarlos a la oración. Sin embargo, en la actualidad, muchas personas deben laborar por razones prácticas.
