Estados Unidos trabaja “intensamente” con el Reino Unido para alcanzar un “gran” acuerdo económico bilateral”, dijo el vicepresidente estadounidense, JD Vance, en medio de la inquietud por los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump.

Sin duda, “estamos trabajando arduamente con el gobierno de Keir Starmer” en un acuerdo económico, afirmó Vance en una entrevista con el portal digital británico UnHerd.

“El presidente Trump siente un gran cariño por el Reino Unido”, por lo que es “una relación muy importante. Es empresario y tiene varias relaciones comerciales importantes en el Reino Unido. Pero creo que es mucho más profunda. Existe una verdadera afinidad cultural. Y, por supuesto, Estados Unidos es fundamentalmente un país anglosajón”, subrayó el vicepresidente.

Se mostró muy optimista de que el acuerdo pueda ser beneficioso para los dos países.

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La relación bilateral otorga al Reino Unido una posición más ventajosa que otros países europeos a la hora de negociar nuevos acuerdos comerciales, señaló.

“Si bien apreciamos a los alemanes, dependen en gran medida de las exportaciones a Estados Unidos, pero son bastante estrictos con muchas empresas estadounidenses que desean exportar a Alemania”, resaltó.

Trump impuso amplios aranceles a las importaciones a Estados Unidos a principios de abril, lo que provocó alteraciones en los mercados de valores y generó temor a una recesión global.

No obstante, desde entonces, Trump dio marcha atrás en la aplicación de algunos de ellos, reduciendo la tasa que se paga sobre las importaciones de la mayoría de países al 10% y, el 12 de abril, indicó que podría eximir a productos electrónicos como teléfonos inteligentes y ordenadores portátiles, aunque luego lo matizó.

El Gobierno británico ha insistido en que trabaja intensamente para alcanzar el acuerdo económico con Estados Unidos, si bien no ha aportado detalles sobre su contenido.