Guatemala enfrenta una constante ola de violencia en 2025 mantiene cifras elevadas de muertes violentas, concentradas principalmente en zonas urbanas densamente pobladas y horarios específicos. Los patrones identificados reflejan la operación continua de estructuras criminales organizadas.

En paralelo, las extorsiones han evolucionado y se expanden tanto en áreas urbanas como rurales, afectando a comerciantes, transportistas y familias. El Ministerio Público enfrenta una alta carga de casos y limitaciones investigativas, mientras que el Ministerio de Gobernación ha sido objeto de cuestionamientos por la falta de resultados sostenibles en materia de seguridad.

Para abordar esta problemática, se consultó a Enrique Degenhart, director del Observatorio de Seguridad, Justicia y Desarrollo de Guatemala (OSJUDEGUA), y a Eddie Rodríguez, Fiscal Adjunto contra la Extorsión, quienes coincidieron en que casi el 50 % de las muertes violentas registradas en el país ocurren en solo cinco municipios del departamento de Guatemala.

El Director Ejecutivo de la OSJUDEGUA indica que las requisas en centros carcelarios reducen las denuncias por extorsiones, pero luego vuelven a aumentar.

Guatemala enfrenta una violencia que muta, persiste y se adapta. Desde la extorsión silenciosa que asfixia a los pequeños negocios, hasta los homicidios que se repiten cada día.

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Por Roxana de León