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Tragedia en Chimaltenango: mueren en la carretera Sor Josefa Catalán y Chabelita, una joven con discapacidad
La madrugada de este sábado dejó un profundo silencio en el Colegio y Hogar Padre Juan André Tiboldi, en Chimaltenango. Dos figuras queridas de la comunidad —Sor Josefa Oliva Catalán e Isabel Roblero, conocida como Chabelita— murieron arrolladas por un vehículo de transporte pesado que no se detuvo tras el impacto. El hecho ocurrió en […]
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La madrugada de este sábado dejó un profundo silencio en el Colegio y Hogar Padre Juan André Tiboldi, en Chimaltenango. Dos figuras queridas de la comunidad —Sor Josefa Oliva Catalán e Isabel Roblero, conocida como Chabelita— murieron arrolladas por un vehículo de transporte pesado que no se detuvo tras el impacto. El hecho ocurrió en el kilómetro 61 de la ruta Interamericana, en la aldea El Cuntic, municipio de Zaragoza.
Según la información preliminar difundida por el canal católico Stella Maris T.V., el accidente se registró alrededor de las 4:40 horas de la mañana, bajo la pasarela del sector. Vecinos que se encontraban en las cercanías escucharon un estruendo que rompió la quietud de la madrugada.
Sor Josefa, originaria de San José del Golfo, dedicó varias décadas a la enseñanza en el “Tiboldi”, donde era considerada una de las maestras más apreciadas del centro. En los últimos años, enfrentaba dificultades para caminar, lo que volvía especialmente complejos los trayectos que implicaban subir o bajar gradas. Por esa razón evitaba utilizar la pasarela peatonal.
A su lado siempre estaba Isabel, interna del hogar desde hacía más de 20 años. Chabelita, como la llamaban con afecto, vivía con discapacidad y acompañaba a la religiosa en sus desplazamientos diarios. Ambas habían salido temprano hacia la Ciudad de Guatemala para participar en una ceremonia de graduación.
Sor Magdalena Ixcoy, encargada del hogar, explicó al medio referido que las limitaciones físicas de Sor Josefa hacían necesario buscar rutas alternas para cruzar la carretera, y que Isabel la apoyaba constantemente por su condición especial.
La comunidad educativa y religiosa permanece consternada mientras esperan que las autoridades avancen en la investigación para identificar al conductor responsable, que huyó tras el impacto.
