El presidente estadounidense,Donald Trump, afirmó este lunes 26 de mayo que evalúa la posibilidad de retirar otros US$3 mil millones en subvenciones para Harvard, con el propósito de redirigir esos fondos a centros de formación profesional. Además, insistió en que esa universidad aún no ha remitido las listas de estudiantes extranjeros que su gobierno exige.

“¡Estoy considerando retirar US$3 mil millones en subvenciones de una Harvard muy antisemita y dárselos a escuelas de formación profesional de todo el país. ¡Qué gran y tan necesaria inversión sería para Estados Unidos!”, escribió Trump en su red social Truth Social.

En los últimos meses, la administración Trump ha recortado cerca de US$2 mil millones en subvenciones federales destinadas a Harvard, ha amenazado con retirarle las exenciones fiscales y, el jueves pasado, anunció que dejará de extender visados a estudiantes extranjeros de esa universidad. Los alumnos ya inscritos deberán trasladarse a otros centros o exponerse a ser expulsados del país.

Esta última medida, que una jueza federal bloqueó temporalmente desde el pasado viernes, responde a la negativa de Harvard de entregar los datos de sus estudiantes extranjeros, lo cual, según el Ejecutivo, permitiría identificar a quienes participaron en protestas propalestinas u otras actividades sancionadas por la administración.

“Todavía estamos esperando las listas de estudiantes extranjeros de Harvard para poder determinar, tras un gasto absurdo de miles de millones de dólares, cuántos lunáticos radicalizados, todos ellos alborotadores, no deberían ser admitidos de nuevo en nuestro país”, escribió Trump, también este lunes, en otro mensaje en Truth Social.

“Harvard es muy lenta en la presentación de estos documentos, ¡y probablemente con razón! Lo mejor de Harvard es que han buscado y encontrado a la mejor jueza (¡para ellos!). Pero no teman, ¡al final el Gobierno GANARÁ!”, concluyó el mandatario.

Desde su retorno a la Casa Blanca, en enero, Trump ha intensificado su enfrentamiento con instituciones académicas de la Ivy League, como Columbia y Harvard, a las que acusa de fomentar el antisemitismo por permitir manifestaciones en contra de la ofensiva israelí en Gaza o de favorecer al Partido Comunista Chino mediante programas de intercambio.