Apuestan por la opacidad electoral

Apuestan por la opacidad electoral

Para las próximas elecciones, el pacto de corruptos busca la opacidad para tratar de burlarse de la voluntad popular.

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18/07/2025 00:02
Fuente: Prensa Libre 

¿Qué habría ocurrido si en las elecciones del 2023 no hubiera habido presencia de observadores internacionales? Es muy probable que se hubiera cometido un fraude electoral para imponer a Manuel Conde, del partido oficialista Vamos. Quizás Bernardo Arévalo no fuera presidente y estuviera en el exilio. Por supuesto que la ciudadanía guatemalteca, principalmente los pueblos originarios, encabezados por los 48 Cantones de Totonicapán, habrían dado la batalla, pero en un ambiente aún más adverso.

Para las próximas elecciones, el pacto de corruptos busca la opacidad para tratar de burlarse de la voluntad popular.

La presencia de los veedores externos es vital en las elecciones de países donde los procesos electorales son traumáticos y están amenazados por estructuras paralelas que buscan la continuidad de regímenes corruptos, como es el caso de Guatemala. Los observadores tienen experiencia alrededor del mundo y sus estándares permiten certificar si una elección fue trasparente o no. No a todos los políticos les gusta el respeto de la voluntad popular expresada en los votos. Ese es el caso de Conde. El 27 de junio pasado, en una reunión de políticos en el TSE, ese excandidato de un partido que ya está cancelado se pronunció contra la presencia de los observadores internacionales y pidió que se limite su participación en las elecciones del 2027. Por ello, le solicitó al TSE que se elabore un instructivo para restringir la labor de los acompañantes internacionales.

La molestia de ese excandidato tiene una razón muy sencilla. Giammattei buscaba que Conde continuara su régimen de impunidad y corrupción. Lo hizo visible en las giras departamentales, además de invertir en él millones, procedentes de nuestros impuestos. Con el respaldo del TSE, Giammattei eliminó a los presidenciables que le podían hacer sombra. Así desaparecieron del proceso electoral Carlos Pineda, Roberto Arzú y Jordán Rodas. Dejaron a Edmond Mulet y a Zury Ríos porque confiaban que con ellos podían continuar la rapiña en el Estado. Lo que no lograron advertir fue que el descontento por la manipulación del proceso le daría aliento a Arévalo, un aspirante que no aparecía en los primeros lugares de las encuestas. A los golpistas les cayó un balde agua fría cuando las diferentes misiones extranjeras dieron a conocer que la votación había sido válida y transparente, a partir de sus propios escrutinios. Conde despotrica contra los observadores porque le echaron a perder la fiesta golpista. Él se veía con la banda presidencial, flanqueado por Giammattei, Miguel Martínez y la corte del pacto de corruptos.

La maniobra de Giammattei había sido de tal magnitud que aún confiaba el 14 de enero del 2024 que podía evitar la toma de posesión de Arévalo. A las 10 de la noche de ese día envió en una bolsa de supermercado la banda presidencial, el collar y el botón de jade, insignias que acompañan la ceremonia oficial. Hasta esa hora se dio cuenta de que no había cuajado el golpe de Estado que promovía, en compañía de Felipe Alejos, Sandra Torres, Consuelo Porras y sectores empresariales afines.

Los observadores son vitales porque pueden dar la voz de alarma internacional contra las prácticas antidemocráticas. En Venezuela fueron ellos quienes constataron y denunciaron que Nicolás Maduro cometió un fraude electoral para aferrarse al poder, pese a que en las urnas había triunfado el opositor Edmundo González Urrutia.

Conde quiere seguir el camino de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, quienes impidieron que en las elecciones nicaragüenses participaran observadores internacionales, además de eliminar a los principales opositores, encarcelarlos y luego enviarlos al exilio para mantener su dictadura. Por eso es importante que el TSE no acepte en ninguna circunstancia que se limite la participación de los observadores internacionales en los comicios del 2027.