El Estado Mayor ucraniano afirmó este viernes que los aeródromos militares rusos de Engels y Diágilevo fueron alcanzados en el ataque con drones de la noche del 5 de junio lanzado por Ucrania contra la Federación de Rusia.

“Durante la madrugada del 6 de junio fue atacado con éxito el aeródromo de Engels, en la región de Sarátov”, se lee en el comunicado del Estado Mayor de Kiev, que atribuye al Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) la operación contra esta base aérea utilizada por Rusia para sus ataques contra el territorio ucraniano.

Al menos tres depósitos de combustible y lubricantes fueron alcanzados en el ataque a la base de Engels, según el comunicado.

De acuerdo con la nota del Estado Mayor, también fue alcanzado el aeródromo militar de Diágilevo, en la región de Riazán de la Federación Rusa, que, según esta fuente oficial ucraniana, alberga a aviones que proporcionan escolta y reabastecimiento de combustible a otras aeronaves militares rusas y sirve para el despegue de bombarderos.

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Otros objetivos militares, entre los que se especifica un punto logístico de dos divisiones motorizadas del Ejército ruso en la región de Kursk, también fueron alcanzados en el ataque ucraniano de anoche.

Según las autoridades rusas, 174 drones ucranianos fueron derribados esta madrugada sobre varias regiones del país, en otra noche de ataques cruzados contra las retaguardias de ambos bandos.

Ataques de Ucrania a Rusia

El 1 de junio, más de 40 aviones de combate rusos fueron alcanzados con drones escondidos en camiones de transporte civil.

El servicio secreto ucraniano estimó en más de US$7 mil millones el daño económico causado al enemigo con esta operación.

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Además, el martes 3 de junio, más de una tonelada de explosivos colocados bajo el agua fueron activados en el puente de Kerch, que une Crimea con Rusia. Una operación preparada por los servicios secretos de Kiev durante meses.

El presidente ruso, Vladímir Putin, responsabilizó a Kiev por el descarrilamiento de dos trenes en las regiones fronterizas de Briansk y Kursk, que dejó siete muertos y más de un centenar de heridos.

“Todos los crímenes cometidos contra civiles, entre ellos mujeres y niños, en vísperas de una nueva ronda de negociaciones de paz propuesta por nosotros en Estambul estaban, sin lugar a dudas, dirigidos a torpedear el proceso negociador. El ataque fue realizado intencionadamente contra la población civil”, dijo.