El pasado 28 de mayo, en la zona 11 capitalina, fue la última vez que a Pablo Aníbal Méndez Vega lo vieron con vida; las cámaras del sector lo captaron conduciendo el vehículo marca Mini Cooper, placas P-379LHB. Una semana después fue hallado sin vida a ocho kilómetros del lugar a donde se dirigía.

Méndez dijo a su familia que se dirigía a San José del Golfo, Palencia, a realizar un negocio; sin embargo, horas más tarde no respondió el teléfono ni volvió a casa, según relataron sus familiares a los investigadores.

La Fiscalía contra Secuestros del Ministerio Público recibió el miércoles 28 de mayo la denuncia de su desaparición.

“Se empiezan las investigaciones y se solicitan cámaras de vigilancia y algunos tipos de recorridos de la zona 11, en la colonia donde él —Méndez— vivía”, dijo Freddy Santos, jefe de esa Fiscalía.

Agregó que hubo obstáculos en las pesquisas, porque no tenían conocimiento de las rutas que había tomado Méndez después de salir de su vivienda.

Santos expuso que identificaron a la persona con quien presuntamente Méndez se iba a reunir.

“Él nos indica que sí, efectivamente, ese día se habían juntado y que la última vez que lo vio fue en un inmueble ubicado en El Fiscal, San José del Golfo, Palencia”, detalló.

Ese lugar se trataba de un apartamento que había sido alquilado a una persona ese mismo 28 de mayo, ubicado en el segundo nivel de la casa número 4, en la colonia Colinas del Norte 1, El Fiscal.

El apartamento, con acceso directo a la calle, tenía “pocos muebles”, un baño y un cuarto, y en ese lugar hallaron el cadáver de Méndez en estado de descomposición.

“La información que se obtuvo es que el inmueble había sido alquilado precisamente el día 28 de mayo por una persona que aún se encuentra bajo investigación y se está perfilando para ver quién es el responsable o si tuvo algún tipo de participación en la muerte del señor Pablo”, expuso el fiscal.

Así intentaron ocultar el cadáver

El cadáver de Pablo Aníbal Méndez Vega estaba envuelto en sábanas y, según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), la causa de muerte fue asfixia por estrangulación.

“El cuerpo estaba envuelto en sábanas, con bastante cal y algún tipo de líquido, imagino, para poder evitar ese mal olor que expelen las personas ya fallecidas”, comentó el fiscal.

Durante el allanamiento, los investigadores y fiscales hallaron botellas de cerveza, candelabros, un bote con químicos y documentos.

“Si bien es cierto que el inmueble fue alquilado ese mismo día, no sabemos si realmente fue rentado para asesinar a Méndez”, explicó.

Hipótesis

Agregó que una línea de investigación es que a Méndez lo hayan matado tras una discusión y un desacuerdo cuando pretendían hacer un negocio.

“La información que tuvimos es que iba a hacer un negocio; no se sabe qué tipo de negocio, no tenemos la certeza de que realmente el señor Pablo iba a vender un vehículo”, relató Santos.

¿Qué pasó con el carro de Pablo Aníbal Méndez Vega?

El fiscal dijo que el 4 de junio recibieron una alerta de un vehículo abandonado en El Progreso, Jutiapa, y cuando llevaron a cabo la diligencia determinaron que se trataba del vehículo que conducía Méndez cuando salió de su casa.

“Se abocó el Ministerio Público, procesó la escena, documentó el vehículo, donde fueron localizados algunos elementos que pudieran ayudarnos en la investigación”, comentó.

El caso por la muerte de Pablo Aníbal Méndez Vega ahora será conocido por la Fiscalía de Delitos contra la Vida del MP.