El Ministerio Público allanó inmuebles relacionados con el presidente Arévalo y su hermano por supuesta corrupción en el control de puertos. El gobierno rechazó las acusaciones y la investigación sigue en curso.

El Ministerio Público de Guatemala, a través de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), realizó un operativo de allanamiento, registro e inspección ocular en varios inmuebles ubicados en Puerto Quetzal, Escuintla.

Las diligencias forman parte de una investigación que menciona al presidente Bernardo Arévalo y a su hermano Martín Arévalo por su posible vinculación en supuestos actos de corrupción relacionados con el control de puertos en el país.

De acuerdo con declaraciones del jefe de la FECI, Rafael Curruchiche, la denuncia que dio origen al caso señala que los hermanos Arévalo habrían facilitado el traspaso del control de puertos guatemaltecos a empresas de origen chino. La fiscalía indicó que los inmuebles inspeccionados estarían relacionados con dicha hipótesis, incluyendo terrenos vinculados al Instituto de Previsión Militar y a la Empresa Portuaria Nacional Quetzal.

En un comunicado, la FECI destacó que, de comprobarse los hechos, las acciones de los acusados podrían configurar delitos de corrupción, abuso de autoridad o tráfico de influencias.

Canal Antigua consultó al gobierno central si emitiría alguna declaración o postura al respecto. La Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia respondió descalificando las denuncias, a las que calificó como “fantasías animadas” y “señalamientos espurios”.

Además indican esto sucede al poco tiempo que se firmó un acuerdo con la Marina de los Estados Unidos para fortalecer las operaciones de la Empresa Portuaria Quetzal.

El gobierno indicó que no otorga relevancia a las acusaciones, que considera infundadas, y aseguró que estas no afectarán el desarrollo de sus políticas ni las relaciones con socios internacionales.

Por Andrea Palacios