TGW
Guatevision
DCA
Prensa Libre
Canal Antigua
La Hora
Sonora
Al Día
Emisoras Unidas
AGN

Pemex asesora al MEM en procesos para cierre de campo petrolero Xan operado por Perenco
Ante el próximo vencimiento del plazo del contrato petrolero 2-85, para la operación del campo Xan, en San Andrés, Petén, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) ha iniciado los preparativos y procesos para el cierre de los pozos de esa área, con asesoría de Pemex.
Enlace generado
Resumen Automático
El MEM informó recientemente que, a través de la cooperación bilateral entre Guatemala y México, obtuvo el respaldo de la compañía estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) para el cierre técnico y desmantelamiento del campo petrolero Xan, ubicado en San Andrés, Petén.
Esta empresa brindará asesoría técnica para elaborar el Plan de Cierre, Desmantelamiento y Abandono del Campo Xan. Este consiste en aportar conocimientos y experiencia en actividades relevantes, como el cierre adecuado de los 59 pozos que conforman la actividad petrolera en esa área.
Además, se contempla el desmantelamiento propicio y la disposición final que debe aplicarse a la infraestructura y equipos relacionados con dicha operación, agregó la cartera recientemente.
El viceministro Carlos Ávalos expuso el martes, durante una citación con el diputado José Chic, de la bancada Vos, que personal técnico del MEM ha realizado dos inspecciones importantes, una de ellas con el apoyo de Pemex.
Con personal de esa compañía se trabajó en establecer los parámetros iniciales para el cierre de un pozo.
Refirió que los técnicos guatemaltecos tienen experiencia en la apertura y supervisión de pozos productores; sin embargo, para cerrarlos es necesario fortalecer esas capacidades, por lo que han recibido asistencia de Pemex.
Dicha cooperación se ha dado localmente —con cursos impartidos por esa empresa—, así como mediante una pasantía en campos petroleros mexicanos, con el objetivo de determinar el proceso adecuado para controlar el cierre de un pozo, explicó el funcionario.
A esto se suma el concepto de protección ambiental, ya que no es lo mismo implementar medidas ambientales en pozos en producción que en aquellos que serán cerrados, agregó. En estos casos deben adoptarse prácticas para prevenir cualquier tipo de incidente.
Por el momento, no se cuenta con equipos de trabajo permanentes en la zona petrolera, y las labores se han llevado a cabo con el personal que tradicionalmente ha supervisado el área en los últimos años. Este grupo está siendo capacitado, y se busca apoyo externo para desarrollar las tareas, pues no es una labor para la cual el ministerio ni el Estado estén preparados.
Según Ávalos, se debe intervenir en casi 60 pozos, cada uno con sus particularidades, por lo que es necesario analizar cada caso y determinar el procedimiento técnico para su cierre.
El funcionario explicó que la fecha de finalización del contrato es el 12 de agosto del 2025; sin embargo, después de esa fecha deberán ejecutarse los procedimientos para la entrega de bienes y documentación.
Añadió que ya se cuenta con un inventario, y actualmente se realiza una reclasificación para evitar confusión en los números. A la fecha, ya se efectuó una primera clasificación, que incluye los bienes más fáciles de identificar, y otros que deben ser adaptados. Esta semana se finaliza una clasificación adicional, basada en ese inventario, para determinar cuáles bienes son aptos para seguir en uso y cuáles pueden declararse como chatarra.
El contrato 2-85 es operado actualmente por la compañía francesa Perenco Guatemala Limited, y finalizará el 12 de agosto próximo, luego de 25 años de vigencia original y 15 de prórroga.
Con la ley vigente, no puede prorrogarse nuevamente, por lo que el ministerio ya inició los procesos para el cierre técnico y desmantelamiento de los pozos del campo Xan. Para ello, declaró de emergencia ese proceso y la contratación de una empresa que ejecute esa labor.
El Gobierno, por medio del MEM, informó que dicho contrato no incluye un plan de cierre técnico y ambiental, por lo que el Estado deberá asumir ese costo, estimado en unos US$50 millones, según funcionarios de la entidad.
Mientras tanto, diputados oficialistas presentaron una iniciativa de reformas a la Ley de Hidrocarburos que obligaría a las empresas a establecer y cumplir con un plan de cierre técnico y recuperación ambiental, pero también abriría la posibilidad de prorrogar los contratos por hasta ocho años, lo que incluiría al contrato 2-85 operado por Perenco.
Una de las propuestas de reforma establece que, para otorgar la prórroga de contratos de operaciones petroleras de explotación y exploración, deberá aumentarse la regalía originalmente pactada, la cual no podrá ser menor al 10%.