El Ejecutivo oficializó la creación de una Comisión Nacional de Diálogo, cuyo propósito principal será coordinar acciones interinstitucionales para atender conflictos sociales, con énfasis en aquellos relacionados con la tierra, el territorio y la conflictividad agraria y comunitaria.

Aunque ya fue establecida mediante un acuerdo gubernativo reciente, la Comisión —denominada Coprecon— aún no cuenta con un presupuesto específico ni con un director ejecutivo oficialmente nombrado.

La persona que asumirá el cargo ya fue definida, pero su designación se anunciará en corto plazo.

Esta instancia tendrá vigencia hasta el año 2029, como parte de lo que se ha definido como un plan piloto, cuyo funcionamiento inicial se centrará en crear mecanismos básicos de articulación entre instituciones del Estado.

Función y alcances

Según explicó la Secretaría General de la Presidencia, la Coprecon no tendrá funciones resolutivas ni ejecutoras. Es decir, no intervendrá directamente en los conflictos ni propondrá soluciones inmediatas. Su labor será de coordinación técnica, con el objetivo de recopilar información, sistematizar los casos y canalizarlos hacia las instituciones competentes.

Aunque ministerios como Agricultura, Ambiente y Energía y Minas participan en su instalación, la comisión no se limitará a conflictos agrarios o mineros, sino que tendrá mandato nacional.

Una de sus prioridades será la identificación temprana de focos de tensión agraria y comunitaria, como los relacionados con disputas de tierra, desalojos forzados, expansión de megaproyectos, superposición de títulos de propiedad, y tensiones persistentes entre comunidades indígenas y el Estado.

A pesar de no contar con presencia territorial ni con personal técnico desplegado en el campo, el acuerdo establece que la comisión podrá convocar a instituciones y organizar mesas de diálogo temáticas, según la naturaleza del conflicto.

¿En qué se diferencia de la Copadeh?

Al ser consultado sobre el vínculo entre esta nueva figura y la Comisión Presidencial por la Paz y los Derechos Humanos (Copadeh), el Ejecutivo aclaró que no se trata de un reemplazo, ya que las funciones y alcances de ambas estructuras serían distintas.

La Copadeh se enfocara exclusivamente en la defensa de los derechos humanos, retirándola del manejo de conflictos sociales. El argumento fue que asumir ambos roles podría convertirla en “juez y parte”, lo que afectaba su independencia e imparcialidad como instancia defensora.

En ese contexto, la Coprecon surge como un ente técnico de coordinación interinstitucional, cuyo objetivo es canalizar los conflictos hacia las instituciones responsables de dar seguimiento.

De acuerdo con la explicación oficial, esta separación de funciones permite evitar conflictos de interés y delimitar con mayor claridad las competencias estatales frente a las disputas sociales.

Mientras Copadeh tiene una estructura robusta, la Coprecon carece de presencia territorial, no tiene funciones ejecutoras ni estructura institucional definida. Su mandato se limitará a facilitar la articulación entre dependencias.

Casos heredados y criterios de priorización

Como parte de su instalación, la comisión recibirá la base de datos de los conflictos que hasta ahora estaban siendo gestionados por Copadeh, así como los incluidos en el Acuerdo Agrario firmado por el presidente Arévalo.

Entre los primeros casos que abordará se encuentran varios que ya estaban siendo acompañados desde el inicio de la actual administración, en enero de 2024.

Los conflictos serán priorizados con base en cuatro criterios principales:

• Urgencia temporal, según la rapidez con que la situación pueda escalar.
• Intensidad del conflicto, determinada por el nivel actual de tensión.
• Capacidad de respuesta, en función de los recursos que serían necesarios para una eventual intervención.
• Impacto social, evaluando cuántas personas podrían verse afectadas directa o indirectamente.

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